viernes, 18 de febrero de 2022

Cuentos de Antes. Antonio Sogorb

Este chaval, que nunca antes durmió en cama ajena

 Un chiquillo de 17 años, en Alicante, se debatía entre marchar a estudiar medicina siguiendo las recomendaciones familiares o dejarse llevar por sus deseos y estudiar educación física, aunque el INEF de Madrid todavía no era una Universidad al uso, y dar rienda suelta a su obsesión por los deportes. Finalmente se impuso la irracionalidad de su obsesión.

Así, tras un buen resultado en las pruebas de acceso, este chaval, que nunca antes durmió en cama ajena, que tan solo había salido de Alicante para asistir a competiciones de Atletismo con el equipo de su colegio, se convirtió en el alumno más joven de esta institución en toda su historia y se encontró de repente en una ciudad inmensa, sin familia, ni amigos conocidos a los que acudir, y con el Sr. Beorlegui como mandamás de su destino. en la Residencia.

El no haber alicantinos en su promoción, ni en las previas, tampoco favorecía mucho a la nostalgia que este muchacho sintió por su terreta los primeros días, pero eso no hizo mella en su carácter y se centró en descubrir la vida y en compartir, con sus nuevos compañeros, experiencias que nunca soñó.

Las novatadas,

Inef, inef, inefito inef

El veteranado nos trata muy bien

siempre nos levantan a eso de las seis

a eso de las seis, a eso de las seis

Inef, inef, inefito Inef

dirigidas por los inefables Pedro Artero, Titín Labajos y el comandante Topete, finalizaron con una fiesta en la que pudo bailar con Paloma San Basilio, entonces novieta de uno de la Blume que corría 400 metros.


Luego el descubrimiento de diferentes deportes, que desconocía, pero que me encantaron. Y ¡cómo no! aquellos fines de semana pasando de los patios de Aurrerá al Quinto Toro, del Gatuperio al Chapandaz y finalizando en el “42” de Claudio Coello, para acabar años más tarde currando en la Boite Enmanuelle de Capitan Haya.

No sé si todo ello me sirvió como trayectoria profesional, pero lo que sí es incontestable es que esos episodios marcaron para siempre mi vida y configuraron mi forma de ser. Cuando mis amigos alicantinos me preguntaban que hice en Madrid, yo les respondía “Aprender a vivir y hacerme un hombre”. Y todavía me siento muy satisfecho de ello. ¡Ya lo creo!         

Antonio Sogorb Lledó "El Dado"

2 comentarios:

  1. !Qué bueno ! Antonio Sogorb, todo un personaje y al que recuerdo con cariño. Comparto gran parte de lo que expone en su amena historia. Espero que esta marea no pare. Animo a todos los ex compañeros desde aquí. M. Feria.

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  2. Por cierto, recuerdo otra canción de novatadas:
    !Qué buenos son
    Los Hermanos Veteranos!
    !Qué buenos son
    que nos llevan de excursión!
    ( paseo con las chicas de El Almudena por Moncloa)

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